Parto en casa

Cuando contratas un pack Parto en Marenostrum estás contratando el acompañamiento de una comadrona y una partera que harán el seguimiento de tu embarazo, irán conociendo tu historia y la de tu familia, estarán de guardia por ti las 24hs desde la semana 37 a la 42.

Además te brindarán información sobre cada una de las prácticas a realizar para que puedas elegir libremente. El día del parto vendrán las dos, traerán la piscina y todo el material necesario para asistir tu parto y brindarte las medidas de confort para que puedas entregarte al viaje más importante de tu vida.

Una vez acabado el parto se continúa con los cuidados post natales tuyo y de tu bebe durante 6 semanas de vida. Vendrá un pediatra del equipo a visitar a tu bebé durante la primera semana de vida en casa, y podrás visitar a un osteópata en nuestro centro para revisar a la criatura durante la cuarentena. Nos aseguraremos de que todo vaya como lo esperabas.

Solicita una entrevista gratuita y te explicaremos más detalles.

Nuestro hogar es la cueva donde nos sentimos seguras, cuya intimidad nos permite reír, bailar, hacer el amor. Nuestro hogar nos hace conectar con la libertad y fuerza interior. Y es ese el poder que invocamos en el parto en casa.

El equipo de Marenostrum lleva más de 20 años confiando en ese poder femenino y brinda la experiencia de sus profesionales para acompañar a la mujer en un parto fisiológico guiado por la oxitocina (la hormona del amor y la intimidad) de manera natural.

Tanto el parto como el embarazo, puerperio y lactancia, son contemplados por nuestro equipo como parte integral de la salud de la mujer. La concepción holística de nuestro centro nos hace contar con herramientas como la homeopatía, la osteopatía, la fisioterapia o la nutrición que nos permiten abordar las disfunciones que pueden aparecer durante las diferentes etapas del embarazo, más propias de estilos de vida que de la gestación en sí misma.

Sabemos que la atención respetuosa y enfocada en los cuidados adecuados son las bases del parto fisiológico, nuestra labor se basa en la evidencia científica. Como equipo estamos en constante reciclaje y formación actualizando nuestras prácticas para poder brindar la seguridad que un parto requiere.

Creemos que un parto debe ser acompañado y guiado chequeando que nada se salga de los parámetros de la salud, y con la certeza de que si eso ocurre tenemos los recursos para abordarlo (incluyendo un traslado hospitalario si llegara el caso). Pero además sabemos que un parto no puede ser mirado o entendido como un proceso solamente físico; se trata de un proceso femenino y como tal tan complejo y con tantas aristas que nos conmueve hasta el punto de vivirlo como un milagro o como se contempla una obra de arte.

Sabemos detalladamente que cada mujer, cada díada (mamá-bebé), cada pareja, es única e irrepetible, es por eso que los protocolos nos sirven para atender las urgencias que se puedan presentar, pero el acompañamiento integral se basa en conocer lo suficiente a cada mujer que nos permita ir desvelando qué emociones puede estar transitando, cuáles son los momentos límites del proceso normal de un parto y cómo dar ese sostén de cuerpo y alma para que la protagonista logre por sí sola -y con la fuerza vital de su bebé y el pilar de su pareja hacer la gran transmutación. Desde esta profundidad, donde están presentes la filosofía y la espiritualidad, concebimos el parto, y es así como sentimos estar a la altura de lo que sucede, la llegada de un nuevo Ser.